Autor: jose

Torremejía es un pequeño pueblo de la provincia de Badajoz que se encuentra a escasos 15 minutos de la capital extremeña, Mérida. Existen muy pocos documentos históricos sobre su historia, aunque sí conocemos que antaño fue (y es) uno de los puntos de paso que conectaba la «Bética» con Extremadura, lo que pasó a llamarse Vía de la Plata. Aún hoy día sigue siendo un punto de paso para muchos peregrinos.

¿De dónde viene el nombre de Torremejía?

Cuentan que su nombre viene del escudo de la familia de D. Diego García Torres y Mejía, ya que éste ordenó construir una torre que recibió el nombre de los Mojicones y esta dio lugar al término del municipio.

A sus alrededores encontraremos vastos campos de viñedos de cuyo fruto se extrae el cava de la Vía de la Plata, como se observa en la siguiente imagen.

Una de sus curiosidades más destacadas quizá sean las estatuas que se encuentran literalmente incrustadas en los muros de un antiguo edificio patrimonio del pueblo que más tarde pasó a ser un albergue de la Junta de Extremadura y que actualmente se encuentra cerrado al público.

Al parecer tienen origen romano y se cree que fueron robadas y utilizadas como sedimento para la realización de los muros del edificio, cuando aún nadie aportaba a dichas reliquias el valor que hoy tienen. Sin duda es algo muy curioso de ver y objeto de numerosas fotografías para todos los viajeros que pasan por Torremejía.

De ventanas con vistas al cielo a puertas con acceso a ninguna parte

Si observamos la parte trasera de este edificio, encontraremos también algunas estancias en ruinas que merecen especial mención, sobre todo para los amantes de la fotografía. Desde ventanas con vistas al cielo a puertas con acceso a ninguna parte, la imaginación se abre paso para el viajero.

En Extremadura impera la Dehesa y con ella los parajes naturales, espacio propicio para la realización de actividades y deportes al aire libre. Es por ellos que congrega cada año a miles de aventureros que se embarcan en la realización de diversos deportes extremos como el puenting, la escalada, las rutas de aventura o los deportes de invierno, descubre la adrenalina en Extremadura.

A 15km de nuestro albergue se encuentra Alange, donde además de contar con una playa artificial de agua dulce que presume del galardón de Bandera Azul, también tiene muchas zonas para la práctica de la escalada. Presenta un total de 136 vías, repartidas en 19 sectores. Están todas equipadas con parabolt, con los seguros muy cercanos, en casi todos los casos. La roca es cuarctia, muy dura.

Otra de las actividades a realizar en muchos puntos de Extremadura y proximidades de Torremejías es el puenting, por nombrar un salto podríamos hablar del que se lleva a cabo sobre el puente de Valdivia, a 35 metros por encima del Rio Guadiana. ¡Todo un desafío a las leyes de la gravedad!

Para los amantes de los deportes de invierno, y durante los meses más frescos del año, siempre se podrá acudir a las instalaciones de la Estación de Esquí “Sierra de Béjar – La Covatilla”, caracterizada por la amplitud de sus pistas en suave pendiente. En ella encontrarás todo lo necesario para una jornada completa de esquí: equipos de alquiler, prendas de montaña y material de protección, profesores de esquí cualificados, cafetería restaurante autoservicio y un magnífico taller para poner a punto su equipo. 

Pero si de algo presume Extremadura es de la infinidad de senderos y rutas de aventura que discurren por ella. También en Alange encontramos una ruta de aventura compuesta por un sendero aéreo lleno de actividades como escalada, tirolinas, puentes monos y tibetanos, descenso en rapel, cuevas y senderismo. Tiene una duración aproximada de 5 horas 30€ por persona. 

Sí hay playa, Extremadura es la comunidad autónoma con más kilómetros de costa interior (más de 1.500) y está a la cabeza entre las playas continentales que tienen su calidad avalada por los controles que cada año realiza el Ministerio de Sanidad, dentro del sistema Náyade. Sí hay playa, ocho de las cuales cuentan con bandera azul, un distintivo internacional otorgado a playas, puertos deportivos y embarcaciones de turismo sostenible.

Sí hay playa

Muy cerca de Torremejía, a tan solo 15 km se encuentra la playa de Alange, cuyo principal atractivo es que se encuentra cubierta de arena y no piedras como suele ser en la mayoría de espacios de este tipo. Durante el verano podrás disfrutar también de distintos deportes acuáticos como piragüismo, vela o windsurf. Dispone también de un pequeño parque infantil en el que los más pequeños podrán divertirse sin que los pierdas de vista.

Hasta el momento no cuenta con chiringuito ni bares para tomar algo, pero sí que hay un bar-restaurante con terraza al otro lado de la carretera por donde se accede al embalse. Lo que sí encontrarás son sombrillas y un techo de madera en el que podrás resguardarte del calor los días más tórridos del verano. Un plan interesante tras refrescante en el pantano es visitar el balneario de origen romano de Alange. La visita merece realmente la pena, ya que su ubicación es la misma que la de la época de Trajano y Adriano.

Otra opción muy cerca de Torremejía es la playa de Proserpina en Mérida, que es también conocida como La Charca para los locales de la ciudad. Esta sí cuenta con varios chiringuitos a su alrededor donde disfrutar de una bebida bien fría.

Uno de los principales atractivos de la zona es la práctica de piragüismo, ya que sus aguas tranquilas favorecen a que los niños menos experimentados disfruten de este deporte. También hay barcas de pedales disponibles para alquilar, que cuentan con un tobogán para deslizarse hasta el agua.

Para rematar el día contamos con el Centro de Interpretación del Agua, comúnmente conocido como Museo del Agua. Aquí podemos hacer un recorrido histórico por la estructura hidráulica de Mérida hasta nuestros días, a través paneles informativos y una exposición interactiva.

Referencias tan peculiares como “Ciudad del Romanticismo”, “Ciudad de la Cordialidad” o “Ciudad internacional del Vino” caracterizan a una ciudad como Almendralejo, merecedora de tales connotaciones.

Capital de Tierra de Barros

Ubicada en plena ruta Vía de la Plata, antigua calzada romana que conectaba los extremos norte y sur de la Península Ibérica, esta ciudad se presenta como la capital de la comarca de la Tierra de Barros, conocida también por sus viñedos y bodegas.

Sede de la Ruta de la Plata

El abanico cultural, patrimonial, gastronómico y natural  que abraza Almendralejo está íntimamente ligado al vino y la aceituna. De ahí que sea la sede de la Ruta del Vino Ribera del Guadiana, cuyo interminable mar de viñedos y olivares metamorfosea sus colores con el paso de las estaciones.

Vinos de Almendralejo

Sin salir de la ciudad se pueden viositar bodegas tradicionales, artesanales, modernas e innovadoras que abren sus puertas e invitar a probar sus vinos y descubrtir su singular historia, además de edificios emblemáticos como el Palacio de Monsalud, la Parroquia y el Teatro Carolina Coronado, entre otros